Elementos naturales, viento, fuego, aire caliente llevan al globo en un viaje único a través de los cielos, el método original de transporte de pasajeros todavía se mantiene hasta el día de hoy. Pararse en una canasta hecha de mimbre natural, sin restricciones, son sentimientos de liberación, ya que es posible flotar en el cielo sin obstáculos.
La huella que deja el armado del globo listo para volar es absolutamente mínima, sin manchas de aceite, sin derrames de combustible, sin vapores nocivos, solo un par de hojas de hierba dobladas
No se necesitan pistas con metros de asfalto, para despegar con un Globo Aerostático.
Nunca se necesita la destrucción de algún ambiente ecológicamente sensible, cualquier área razonablemente plana y cubierta de hierba será suficiente.
Cuando calculamos las emisiones de gases contaminantes por unidad de energía producida por el gas natural (GN) y el gas licuado (GLP), vemos que es menor que en otros combustibles fósiles, por lo que se los considera fuentes de energía más limpias, que contribuyen al cuidado del medio ambiente.
Analizamos todas nuestras necesidades de adquisición y buscamos las opciones más respetuosas con el medio ambiente disponibles para cada necesidad.
Nuestros equipos: Canastos: Están hechos de mimbre/ratán pueden durar mas de 40 años si se mantienen bien.
Quemadores de globos: Los quemadores duran más de 40 años.
Tela Hyperlast tiene casi el doble de vida útil que el nailon rip stop convencional: 30 años aproximadamente.
Gas: Usamos gas propano insoluble en agua, no representa una amenaza para los acuíferos o suministros de agua subterránea. Es uno de los combustibles alternativos más limpios.
En cifras:
(*) 1 persona produce 6.000 kg de CO2 anuales y 1 arbol reduce 84 kg CO2 anual.
(*) 1 vuelo en globo como los nuestros ( volumen: 80.000 ft3) consume 25 kg de propano en 1 hora, los que generan 75 kg de Co2
(*) La contaminación de un globo equivale a producir 2,8 kg de carne y se puede reducir su contaminación equivalente plantando 1 árbol. Asumimos el compromiso como tour operador responsable de mantener un vivero y plantar 1 arbol nativo tras cada operación de vuelo, lo que reducirá en 1 año el efecto del vuelo realizado y lo seguirá realizando por toda su vida.